Tercera dosis contra el coronavirus: médicos y científicos piden que los trasplantados comiencen a reforzar sus anticuerpos ante la llegada de la variante Delta

Tercera dosis contra el coronavirus: médicos y científicos piden que los trasplantados comiencen a reforzar sus anticuerpos ante la llegada de la variante Delta

La Argentina impulsa un estudio nacional que está llevando a cabo la sociedad nacional de trasplante para probar la combinación de sueros y los efectos sobre estos pacientes.

Mientras la variante Delta gana terreno en la Argentina y la vacuna se ubica como una barrera de contención, un grupo de personas se encuentran más vulnerables al Covid-19: los trasplantados. Con una respuesta inmune perfectamente controlada para evitar que su cuerpo rechace ese órgano que le salvó la vida, ellos fueron ubicados entre los primeros en ser inoculados contra el coronavirus. Sin embargo, su propia patología impide que su sistema inmunológico responda del mismo modo, abriendo el camino hacia la idea de brindarles una tercera dosis.

En la Argentina hay unas 22 mil personas trasplantadas, según el Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (INCUCAI) le confirmó a TN.com.ar. De este número, 1.852 recibieron su órgano durante la cuarentena, es decir desde el 20 de marzo de 2020 hasta la actualidad.

Sistema inmune bajo control

“Los pacientes trasplantados reciben drogas para preservar al órgano que se les implantó del riesgo de que lo rechacen y lo pierdan; y la medicación inmunosupresora logra el objetivo a través de ejercer un freno sobre el sistema inmunológico”, explicó a TN.com.ar Alejandra Villamil (MN 77116), presidenta de Sociedad Argentina de Trasplantes.

Sin embargo, con las vacunas se impulsa el efecto contrario. “Lo que buscamos es una respuesta inmunológica, por eso es lógico que los niveles de anticuerpos formados sean menores en toda aquella persona que tenga una inmunosupresión, por un trasplante u otra condición similar”, señaló Alejandro Bertolotti (MN 89399), Jefe del Departamento de Trasplantes de la Fundación Favaloro. “Esta situación ya es conocida ante otras vacunas y hay evidencias que ese mismo comportamiento ocurriría con la vacunación contra el SARS-CoV-2″, completó Villamil

De todos modos, los especialistas aclaran que cada patología y cada organismo mostrará un comportamiento particular, aunque existen algunas consideraciones generales: “La respuesta de anticuerpos a la vacuna en receptores de tejidos no fue estudiada, pero no reciben tratamiento con drogas inmunosupresoras luego del trasplante, por lo cual no habría razón para esperar una menor respuesta. En cambio, los receptores de órganos presentan una menor respuesta de anticuerpos”, señaló Laura Barcan (MN 60770), miembro de la comisión de Infecciones en Trasplante de la Sociedad Argentina de Infectología y de la Sociedad Argentina de Trasplante.

“Hay pocos estudios que analicen la respuesta de inmunidad celular, pero hay algunos trabajos que demuestran, independientemente de la generación de anticuerpos o no, que las vacunas disminuyen la mortalidad por Covid en esta población”, afirmó la además infectóloga del Hospital Italiano Buenos Aires y resaltó que la inoculación en estos grupos no presentó “mayores efectos adversos que en la población general”.

Vacunas y terceras dosis

Con la dicotomía entre la necesidad de generar una respuesta inmune ante el Covid-19 y su control para evitar el rechazo del órgano, las vacunas se subieron a la balanza del costo y beneficio. Sin embargo, el peso a favor de las inoculaciones fue indiscutible. “Los efectos secundarios relacionados a la vacuna ’per se’ no se vieron aumentados, por el contrario, son muchas más las complicaciones en los trasplantados si se enferman de Covid”, destacó Bertolotti.

Y si bien las recomendaciones de las sociedades científicas nacionales e internacionales evidencian que “todo paciente trasplantado y que esté en lista de espera debe recibir la vacuna”, la baja respuesta inmune generó un nuevo enfoque: ¿es necesaria una tercera dosis para una mayor protección?

“Se está postulando una tercera dosis desde varias investigaciones y observaciones que aseguran que genera una mayor respuesta de anticuerpos. Y si bien es una población acotada, la aplicación de un refuerzo no es un tema menor, porque se plantea un dilema logístico y hasta ético. Habrá que ver cómo se lleva a la práctica, tratando de ser equitativo y epidemiológicamente correcto”, reflexionó el experto de la Fundación Favaloro.

En esa línea, Barcan señaló: “Hay un trabajo, publicado este mes, que demuestra que una tercera dosis de la vacuna, aplicada a los dos meses de la segunda dosis mejora tres veces la respuesta de anticuerpos, comparado con la segunda dosis, pero está realizado con vacunas de plataforma de ARN mensajero”.

Estudio nacional

Con la necesidad de contar con datos certeros, la Sociedad Argentina de Trasplantes comenzó a impulsar un estudio nacional para conocer cuál es la respuesta inmune de los trasplantados argentinos, con las vacunas que se aplican en el país y hasta con las combinaciones que se implementaron ante la escasez del componente dos de la Sputnik V.

“La mayor parte de la bibliografía a la cual tenemos acceso y sobre la cual se están estableciendo las estrategias están fundamentadas en el uso, mayormente, de vacunas que no son accesibles para nosotros. No hay información fehaciente sobre cuál es el nivel de respuesta inmunológica con nuestros esquemas (Sinopharm, AstraZeneca y Sputnik V) y menos aún en las combinaciones”, explicó Villamil.

En ese sentido, advirtió que hace escasos días se lanzó una convocatoria hacia todos los centros de trasplantes para que “participen de un proyecto por el cual se determine la cantidad de anticuerpos en pacientes trasplantados, independientemente de cuál sea el esquema y en que tiempos se aplicó, para saber a 28, 90 y 180 días cuál es el nivel de respuesta inmune”.

En palabras de la presidenta de la SAT, este proyecto que generará una representatividad nacional de los trasplantados argentinos permitirá “una radiografía clara de la situación de nuestros pacientes, en nuestro medio y con nuestros esquemas”, además de evaluar la necesidad de una tercera dosis.

El INCUCAI expreso su interés en tener acceso a los datos que surjan de nuestro estudio para responder esa pregunta y otras más, como un relevamiento de ocurrencia de Covid y su severidad post vacunación, además del desempeño de la vacuna, comportamiento del huésped, del trasplante, de los tiempos, de las drogas inmunosupresoras y sus niveles”, destacó Villamil y adelantó que los primeros datos podrían estar en unos tres mes. “Como esta población se vacunó en distintos tiempos en base a edad, comorbilidades y por ser inmunosuprimidos, hay datos que se van a estar obteniendo de forma más temprana”, agregó.

Ni la pandemia frenó los transplantes

Desde el 20 de marzo de 2020 hasta este momento, 1.852 pacientes recibieron un trasplante de órganos: 1.623 lo recibieron de un donante fallecido y 229 de uno vivo. “Trabajamos con protocolos específicos para asegurar que se realicen y ningún receptor se contagió de Covid-19 a partir de un trasplante. Eso marca la seriedad con la cual se trabajó”, aseguró Bertolotti.

 

Fuente: TN